El sol se cotiza alto en Querétaro. La empresa Solfium anunció una inversión de 10 millones de dólares para instalar su planta de energía solar en la entidad, y el gobernador Mauricio Kuri no perdió tiempo en presumir que aquí sí hay “ecosistema empresarial con certidumbre jurídica”, de esos que atraen capital extranjero y dejan empleos, 150 directos y 600 indirectos, para más señas.

Desde el BLOQUE, ese centro de innovación que huele a futuro, Kuri soltó su ya clásico discurso: en Querétaro “todos ganan” —empresarios, trabajadores y hasta el planeta—, y pidió que el estado siga siendo “distinto y distinguible”. Nada mal para una mañana de sol, paneles y promesas de energía limpia.

El CEO de Solfium, Andrés Friedman, vino con buenas noticias y cifras de impacto: su empresa, de capital canadiense-queretano, promete ahorros por mil 600 millones de dólares, 3.5 millones de toneladas menos de CO₂ y apoyo a más de 2,500 Pymes. “Soñemos en grande”, dijo, mientras varios queretanos ya soñaban con su recibo de luz más barato.

El secretario Marco Del Prete aprovechó para meter su mensaje verde: que si economía circular, que si menos emisiones, que si los paneles ayudan al bolsillo. Todo encaja con la estrategia estatal de cuidar el medio ambiente, pero también con el buen ánimo de atraer inversiones.

Y como broche de oro, Felifer Macías anunció que en 2026 habrá por primera vez un premio al mérito en investigación científica. El alcalde aseguró que la confianza de empresas como Solfium demuestra que en la capital “hay orden y Estado de Derecho”.
Querétaro sigue brillando, y no solo por el sol: por las inversiones que le apuestan a un futuro más limpio, rentable… y queretano.